Ya sea que esté cautivado por las vibrantes flores del otoño o simplemente quiera saber si sus mamás regresarán la próxima temporada, comprender su supervivencia depende del tipo de mamá que tenga y de cómo las cuide. Esta guía proporciona consejos claros y prácticos para garantizar que sus madres prosperen año tras año.
Entendiendo las variedades de mamás
Las mamás se clasifican en términos generales en dos tipos: mamás floristas y mamás de jardín. Los crisantemos floristas, que se venden en macetas durante el otoño, a menudo se tratan como anuales debido a sus sistemas de raíces poco profundos y su resistencia limitada (zonas 7-9). Los crisantemos de jardín, sin embargo, poseen raíces más profundas y pueden crecer de manera perenne en las zonas 4 a 9, lo que los convierte en una adición al jardín a largo plazo.
Cómo mantener vivas a las mamás durante el invierno
Si bien los crisantemos de floristería generalmente se descartan después de una sola temporada, los crisantemos de jardín pueden sobrevivir a los duros inviernos con el cuidado adecuado. He aquí cómo:
- Plantación temprana: Plante los crisantemos del jardín en primavera o principios del otoño para permitir el desarrollo de las raíces antes de las heladas. El tiempo es clave; Intente al menos 4-6 semanas antes de la primera helada esperada.
- Luz solar y drenaje: Elija un lugar soleado (al menos seis horas de luz directa) con suelo con buen drenaje. Un drenaje deficiente puede provocar la pudrición de las raíces. Los lechos elevados pueden mejorar el drenaje si es necesario.
- Mantillo de invierno: Aplique una capa de 4 pulgadas de mantillo (madera, corteza o paja de pino) después de que el suelo se congele. Esto aísla las raíces y evita las heladas. Retire el mantillo a mediados de abril durante un período cálido.
Qué hacer con las mamás que no quieres
Ya sea que esté desechando los crisantemos de floristería o adelgazando los crisantemos de jardín, existen opciones de eliminación ecológicas:
- Compostaje: Los crisantemos floristas secos se descomponen rápidamente en las pilas de abono, proporcionando carbono. Picar tallos y raíces para una descomposición más rápida.
- Compartir: Done madres de jardín no deseadas a vecinos, familiares u organizaciones locales. Los cambios de plantas son otra opción.
- Elaboración: Flores secas de mamá para ramos, popurrí o prensado de flores.
Al comprender las diferencias entre las variedades madre y seguir estos sencillos pasos, podrá asegurarse de que sus plantas regresen año tras año, agregando colores vibrantes a su jardín para las próximas temporadas.




















































